Llevamos un siglo utilizándolos, los antibióticos forman parte de nuestra historia médica. Gracias a ellos se han salvado numerosas vidas, y se siguen salvando, de problemas que antes eran incurables. Pero, ¿el consumo de estos fármacos es totalmente inocuo? Dos estudios publicados esta semana apuntan que el uso precoz de antibióticos puede alterar la flora intestinal y estar detrás del aumento de obesidad en todo el mundo.
El tracto gastrointestinal de humanos y mamíferos contiene miles de millones de microorganismos que han desarrollado una función específica en cada especie. Poco a poco, los científicos van conociendo más a estos ‘pobladores’ que portan el nombre genérico de microbioma y su acción sobre el organismo. De hecho, en los últimos años se han desarrollado muchas investigaciones sobre este tema dando lugar a hallazgos importantes.
Estos trabajos han demostrado que un cambio de ese ecosistema del tubo digestivo puede generar defectos en el metabolismo y dar lugar a problemas como la enfermedad inflamatoria intestinal.
Desde hace más de 50 años se sabe que la administración de dosis bajas de antibióticos promueve hasta en un 15% el aumento de peso de los animales de granja. De hecho, el mayor uso de antibióticos y microbicidas en Estados Unidos se realiza por los ganaderos. Europa prohibió en 2006 su uso para el engorde de ganado y sólo permite su empleo para tratar animales enfermos. Read More…